En primer lugar, es mucho mejor si puedes tener dos patos en lugar de uno, porque al no sentirse solos se adaptarán con más facilidad. Y que sean jóvenes también ayudará mucho a que se acostumbren en una casa.
Junto con los pollitos, los patos son una de las compras impulsivas más comunes en las fiestas y mercados populares: lo vemos, nos enamoramos perdidamente y al llegar a casa nos damos cuenta que no tenemos idea de cómo cuidarlo. Para eso y aquí te diremos todo lo que necesitas saber para ser el dueño de un precioso pato feliz.
Antes de comprar uno es muy importante considerar que crecerá y dejará de ser tan lindo como de pequeño, que sus necesidades de espacio cambiarán pronto y que no es justo sólo quererlo mientras es pequeño, un pato adulto es una maravillosa mascota y seguro traerá muchas satisfacciones y agradables sorpresas.
A los patos debemos procurarles agua limpia todo el tiempo, darles alimento balanceado para gallina o una rica mezcla de semillas y granos, además les gustan todas las verduras y frutas, incluso comen uno que otro insecto, es decir necesita una dieta muy variada.
No hay que asustarse si al pato le da por comer piedrecillas, no le va a pasar nada él las necesita para poder moler el alimento en la molleja, en cambio sí hay que cuidar que no ingiera nada tóxico o venenoso, ni piezas de metal, sólo debe comer piedritas.
Desde luego, todos los niños meterán al pato al agua en cuanto tengan oportunidad, esto está bien porque los patos son aves acuáticas, sólo debemos asegurarnos, mientras el pato es pequeño, que la temperatura de agua no sea muy fría, y que después del nado tenga acceso a un lugar seco y cálido –en la naturaleza sería bajo las alas de su madre, debe tener la oportunidad de asolearse un rato cada día y descansar todo lo que necesite, aunque los niños mueran de ganas de jugar de nuevo con él. Hay que recordar que se trata de un bebé hasta que cambie todo su plumaje y los bebés requieren dormir mucho.
Por lo tanto hay que proporcionarle un nido cálido. Nos puede ayudar un foco, pero cuidando que el ave no lo toque, o mediante una bolsa de agua caliente, ésta última tiene la desventaja de que eventualmente se enfría y hay que cambiarla. Como el pato debe estar a salvo de corrientes de aire frío, mientras es pequeño puede vivir dentro de una habitación.
Probablemente el patito querrá estar acompañado todo el tiempo, esto es normal porque sus instintos le dicen que quedarse solo significa ser depredado, no olvidemos que se trata de un animal gregario al que le encanta estar en grupo, por esto casi siempre el pato se impronta con los humanos, es decir, reconoce como su madre a las personas así que sigue a todas partes a su nuevo dueño.
Pero los patos son animales que aprenden a relacionarse con muchos animales además del hombre –por ejemplo con gallinas y otras aves , con perros –cuando los perros colaboran no queriendo cazarlos , y con otros animales de granja como cabras y borregos.
El pato puede mojar el alimento o tomar agua y comer intercaladamente así que es posible darle alimento en el agua, por ejemplo, hojas de lechuga o alfalfa lavadas y desinfectadas previamente, por supuesto hay que cambiar el agua después que haya comido, y tirar los restos porque seguramente el pato defecará en el agua. Esto no lo hace por sucio, son sus hábitos naturales, recordemos que los patos normalmente forman parte de ecosistemas acuáticos y los patos cumplen varias funciones en ellos: mantienen equilibrada la cantidad de vegetación; al alimentarse de larvas de mosquitos y otros insectos, evitan plagas y además fertilizan el estanque con sus heces, propiciando el desarrollo de fitoplancton y zooplancton, base de la cadena alimenticia acuática.
De hecho en algunos lugares se utiliza un tipo de patos insectívoros por excelencia para acabar con las plagas de insectos en los jardines, estos patos se rentan por días, acaban con las babosas, cochinillas, gallinas ciegas entre otros bichos, sin tocar los rosales ni las flores, así que se evitan el uso de pesticidas y otros químicos dañinos para el medio ambiente.
Finalmente, el mejor alojamiento para un pato adulto es un lugar con un estanque de agua en el que pueda nadar, debe contar también con un buen escondite. Éste se puede hacer con una caja de madera grande y paja, para que haga su nido, y el espacio debe estar protegido contra depredadores como el gato del vecino o nuestro propio perro. En ocasiones es mejor construir todo un aviario en forma, para alojar a los patos, y se puede pedir al veterinario que nos muestre cómo debemos cortar las plumas de las alas para impedir que se vaya volando.
Los patos son excelentes compañeros, pueden estar contigo todo el día y saben cuándo estar quietos y callados y cuando hacer una gran fiesta acuática en ¡tu honor!
Fuente: Mascotass.
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